¿QUO VADIS PETRUS?

¿A quién no le ha venido en estos días a la memoria el encuentro entre San Pedro y Jesús, cuando Pedro convencido por la comunidad, abandonaba Roma, porque no creía poder afrontar la persecución de Nerón, que le buscaba para matarle. Era el año 64 y San Pedro que abandonaba su puesto de Pastor Supremo, se encuentra extrañado con Jesús cargado con la Cruz camino de Roma y le pregunta ¿Quo vadis Domine?

Jesús le contesta, voy a Roma a ser de nuevo crucificado, porque tú abandonas mis ovejas y ellas me necesitan.  En la Vía Apia se conserva el recuerdo en una baldosa con las huellas de Jesús.

¿No os parece que puede ser que de nuevo se esté repitiendo esta situación?  Con toda razón y lógica humana, reflexión y sabiduría se abandona el Pastoreo, porque ya no se puede, pero la fuerza  no la tenemos nosotros la da sólo Dios y a quien llama lo llama para cumplir hasta el final, abrazado a la Cruz, la lógica de los hombres, nunca ha sido la de Dios...

¿Qué habría pasado si Pedro, anciano y débil, hubiera seguido su camino para buscar la soledad y la oración porque no se encontraba capacitado para seguir dirigiendo la Comunidad de Roma y enfrentar tan grandes riesgos?

Muchas veces se vuelve a repetir la historia de ese encuentro cuando se toman decisiones comprensibles, razonables y lógicas.., ¿Cuál sería la actitud según la Voluntad del Señor, no según la lógica humana?